Entradas

Mostrando entradas de julio, 2024

Rezongón el cavernario

  Cuando desperté, el Pejesaurio todavía estaba allí. Después de veinte años salí de la cueva. Quedé admirado por ver que los Prinosaurios no se habían extinguido. Sólo estaban más viejos y tenían un color guinda. Me froté fuerte los ojos para asegurarme que no era un mal sueño; pues los Prinosaurios de los famosos tres colores eran enormes camaleones que habían aprendido a adaptarse pintando su piel vejestoria de color guinda. “¡Rezongón, ven pa cá! -me gritó un cavernario-. ¡Qué milagro! Andamos recordando el discurso de ayer del gran Pejesaurio.” No entendía esta nueva fascinación por el gran camaleón y de tanto pensarlo quedé ensimismado entre la fanaticada que hablaba fervorosamente como si fuera un juego de futbol.                Antes de mi sueño profundo en aquella cueva recuerdo que dije:             -Ojalá, algún día acabe este horrible poder de muchos años. Los Prinosaurios engullen sin clemencia a los cavernarios. Los que quedan vivos están obligados a cazar para ellos.